¿Tu cabello está muy seco, se rompe o es extremadamente frágil?
O bien, si notas que a tu pelo le falta brillo, lo notas apagado, las puntas tienden a abrirse con facilidad y tiende a encresparse, lo que te pasa es que tienes un pelo seco o con tendencia a secarse. La única solución es que tendrás que aprender a cuidarlo con mimo y así verás como la apariencia de tu cabello mejora muchísimo.
Un detalle importante para el cuidado del cabello seco y del que solemos olvidarnos es el cuero cabelludo, el cual tenderá a resecarse en exceso. Esto provoca que se descame y se irrite con facilidad, por lo tanto el cabello perderá su elasticidad natural y se volverá frágil, quebradizo y vulnerable, y como consecuencia, las puntas se abrirán con más facilidad.
Para ello lo mejor es estimular las glándulas sebáceas de los poros y para conseguirlo sería estupendo que realizaras suaves masajes capilares mientras te duchas, así conseguirías activar la circulación sanguínea.
Ahora vamos a darte algunos consejos de utilidad para devolverle la fuerza a tu melena y mantener a raya el cabello seco.
- El abuso de planchas o secador, resecan muchísimo el cabello, ahora con el buen tiempo, es importante que lo dejes secar al aire con una mascarilla sin aclarado. Si no tienes otro remedio y necesitas utilizar el secador, asegúrate de que está a una distancia de unos 15 cm y nunca estés más de 15 segundos en el mismo sitio.
- Debes aplicar una vez por semana una mascarilla capilar con el pelo mojado y envolver tu melena en una toalla humedecida con agua caliente para favorecer la absorción del producto. Déjalo reposar durante al menos 20 minutos y después lávate el pelo con normalidad. Es importante que la mascarilla tenga una fórmula nutritiva e hidratante que regenera las fibras capilares dañadas y secas para devolverle el brillo. Para conseguir un mayor brillo y vitalidad, acláratelo con agua fría.
- Aceites capilares: un rápido remedio contra el cabello seco
¿Qué debes evitar en el cabello seco?
- El agua demasiado caliente
- El secador demasiado caliente cerca de la raíz o las puntas
- Secar el pelo frotándolo con una toalla
- Los lavados excesivos